Bélgica está en la búsqueda de la extradición de Mounir Namoussi, un notorio barón de la droga belga-marroquí. Conocido como «Mou», fue detenido a finales de febrero en Barranquilla, en el marco de una investigación internacional sobre el tráfico de cocaína que involucra a carteles de Europa del Este. El Director General de la Policía Nacional Colombiana anunció públicamente la captura de Namoussi el 1 de marzo a través de las redes sociales. Cinco días después, el Ministerio de Justicia belga solicitó formalmente su extradición a Bélgica, donde enfrenta una condena de siete años de prisión tras un fallo en 2021. La operación que llevó a la detención de Namoussi fue fruto de la colaboración entre las fuerzas del orden de Bélgica, Colombia y el Reino Unido. Según las autoridades colombianas, Namoussi jugaba un papel crucial en una red criminal internacional, conectando carteles de Europa del Este con sindicatos de América Latina, especialmente con el infame «Clan del Golfo» de México. «El sospechoso utilizaba cajas metálicas magnéticas para traficar clandestinamente entre 270 y 300 kilogramos de cocaína por semana, adosándolas a cargueros en el mar», declaró el Director General Carlos Fernando Triana Beltrán de la Policía Nacional Colombiana. Los estupefacientes fueron interceptados antes de llegar a los puertos de Róterdam y Amberes. Namoussi ya había sido condenado en Tongres, Bélgica, en 2021 por orquestar envíos de cocaína entre Colombia y Róterdam. Era objeto de una notificación roja de Interpol, lo que indica una orden de arresto internacional emitida por un juez de Limburgo. Article modifié le 07/03/2025 à 13h57