Un total de 2,3 millones de personas y 597.265 vehículos han cruzado el Estrecho este verano, lo que representa un 9,2 por ciento menos de pasajeros respecto al año pasado y un 10,7 por ciento de vehículos, según datos de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias del Ministerio del Interior. Los resultados de la Operación Paso del Estrecho (OPE), del 5 de junio al 15 de septiembre, de este verano consolidan una "tendencia a la baja", que ya se produjo en la edición anterior, respecto al número de viajeros que cruza el estrecho. Durante la fase de salida, embarcaron un total de 1,2 millones de pasajeros y 336.579 vehículos, lo que supuso un descenso del 11,1 por ciento de pasajeros y del 10,8 por ciento de vehículos, frente a 2009. Mientras, en la fase de retorno, el número de embarques de vehículos fue de 260.686, lo que supuso un descenso del 10,6 por ciento respecto a 2009. Los pasajeros descendieron también un 6,8 por ciento respecto al año anterior, sumando un total de 1.059.973. En cuanto a las asistencias sociales y sanitarias, a pesar de las temperaturas muy elevadas registradas durante la estación estival, no hubo incidencias de gravedad. Desde el inicio de la operación y en el marco de la fase de salida, se realizaron un total de 2.025 asistencias sanitarias (un 27,2 por ciento menos que en 2009), fundamentalmente, por afecciones cutáneas, cefaleas, traumas, mareos, y molestias gástricas. Por su parte, en la fase de retorno se realizaron 406 asistencias por los mismos motivos. Las asistencias sociales, que alcanzaron el número de 2.660 en la fase de salida (un 36,7 por ciento menos), la mayoría se refieren a solicitudes de información que se facilita en diversas lenguas, extravíos de personas o problemas de documentación, entre otros. En la de retorno, se realizaron un total de 1.300 asistencias sociales. Por puertos de embarque, en la fase salida, en Algeciras embarcaron 720.829 pasajeros (un 6,6 por ciento menos) y 225.213 vehículos (un 3,3 por ciento menos); en Tarifa, 148.930 pasajeros (un 18,4 por ciento menos) y 27.116 vehículos (un 33,5 por ciento); en Almería, 281.534 pasajeros (un 20,7 por ciento menos) y 64.021 vehículos (un 23 por ciento menos); en Málaga, 48.871 pasajeros (un 4,1 por ciento menos) y 5.875 vehículos (un 19,1 por ciento menos); y en Alicante, 58.194 pasajeros (un 5,5 por ciento por ciento más) y 14.354 vehículos (un 7,1 por ciento más). Mientras, en la fase retorno, por puertos de embarque, en Ceuta han embarcado 205.751 pasajeros (un 26 por ciento menos), 45.296 vehículos (32,6 por ciento menos); en Melilla, 83.150 pasajeros (7,4 por ciento menos), 13.269 vehículos (17,9 por ciento menos). En cuanto al número de rotaciones de barcos realizadas, el total ha ascendido a 11.626, un 23,2 por ciento más que el año pasado. En relación a los embarques procedentes de puertos marroquíes, desde Argel, 7.304 pasajeros y 1.730 vehículos; desde Ghazaouet, 11.788 pasajeros y 3.075 vehículos; desde Orán, 43.645 pasajeros y 10.336 vehículos; desde Nador, 160.742 pasajeros y 32.576 vehículos; desde Tánger, 528.596 pasajeros y 149.788 vehículos y desde Alhucemas, 18.997 pasajeros y 4.616 vehículos. Cambian las fechas de más afluenia Este año, ha habido una variación en las fechas de afluencia máxima, tanto en la fase de salida como de retorno. Así, históricamente los días punta de la fase de salida se han producido a finales de julio o primeros días de agosto y en la fase de retorno a finales de agosto o primeros de septiembre. Sin embargo, este año los días punta se han producido en la fase de salida, el 3, 4 y 5 de julio, siendo el día de mayor afluencia el día 4 de julio. En la fase de retorno, el 5 y 6 de agosto han sido los días de mayor afluencia. El Ministerio de Interior ha calificado positivamente la operación, ya que, a su juicio, el dispositivo establecido, que ha contado con la colaboración de siete ministerios y más de 30 instituciones, ha cumplido los objetivos previstos, ya que los desplazamientos se han desarrollado con "absoluta normalidad". En esta edición de la operación, cuyo inicio este año se ha adelantado al 5 de junio con motivo del mes del Ramadán, se ha producido, de una parte, una "reducción importante en la afluencia de pasajeros y de vehículos, y de otra, se ha continuado produciendo un escalonamiento razonable en la llegada a los puertos de embarque, circunstancia que facilita la fluidez y evita las esperas prolongadas". Así, de acuerdo a Interior, este año, "los embarques se han desarrollado prácticamente de manera automática sin importantes demoras, incluso en las denominadas fechas críticas". Por ello, desde el Gobierno se señala que la capacidad de evacuación de la flota dispuesta para la Operación, compuesta por 36 buques, ha resultado suficiente.